Flujo digital

La aplicación de la tecnología en el consultorio dental ha logrado optimizar el trabajo clínico convirtiéndose cada día más en elementos estándar a encontrarse en la práctica odontológica. Aplicar un flujo digital implica aplicar un sistema de recursos y equipos digitales que ayuden a la disminución del margen de error y mejoren la experiencia del paciente en la silla dental.

Con la evolución de la tecnología se ha logrado simplificar trabajos que involucren la mano de obra en cualquier ámbito cotidiano, y la rama de la odontología no se queda atrás. Siempre ha sido un reto inminente confeccionar tratamientos dentales rentables, de alta calidad, y disminuyendo el margen de error.